Este año, de nuevo, solo se presenta Juan Luis Amaro.
No hay más candidaturas.
No hay otro Hermano que tenga el "VALOR" de presentarse.
No hay más nadie que sea capaz de coger las riendas de nuestra Hermandad.
Personalmente alago a nuestro continuista Hermano Mayor.
Siempre agradeceré a todo aquel que le dedique un solo minuto de su vida a la Hermandad, se tenga más o menos conocimiento de la Historia de Esta, le haya dedicado más o menos horas a "su creación", haya estado solo en los buenos momento o en los menos buenos, hayan pasado por varios locales de alquiler o directamente a la Casa de Dios.
Gracias Juan Luis y a nuestra futura Junta de Gobierno, por no dejar desierta estas elecciones.
Mi intención no es hacer propaganda de ningún tipo. Aunque lo parezca.
Si en caso de que no fuera Juan Luis, hubiera sido otro, hubiera escrito lo mismo pero con otro nombre.
Yo no me presento, al igual que el resto de Hermanos que pueden ejercer este derecho, por distintos motivos, ya sea porque tenemos otras prioridades, obligaciones, falta de compromiso y sobre todo, como he dicho al principio, por falta de valor.
Esta Hermandad tiene dueño, y su nombre es Jesús, y en su Junta de Gobierno están su Bendita Madre, la Santa Cruz, el Santísimo Sacramento, y tantos Santos como queramos.
Ellos son los que han creado esto, cada uno de los mortales que creemos que esto lo hemos hecho nosotros, estamos equivocados. Lo unico que hemos hecho, es aportar lo que ELLOS nos han dejado que aportemos, y nos pongamos como nos pongamos, ELLOS son los que mandan y deciden.
Esto último a que me refiero, solo lo podemos entender los que tenemos FE, para el resto, para los cortitos (de Fe), posiblemente sean paparruchas.
Pues nada, este viernes, los que tenemos derecho al voto, vamos que estemos al día en nuestras cuotas, ser mayor de 18 años y más de un año de antigüedad, entre otras cosas, y creo que seremos unos “300”, con que votemos 200 a Juan Luis y 20 o 30 voten en blanco. Para mí, perfecto.
Y aunque sacara un solo voto, el suyo, para mí perfecto.